[Ciberayllu]
12 marzo 2006

Poempro: A mis ojos

Salomón Valderrama

 

Sentado en una banca
mis ojos se detienen
anclados
en el olvido
de todo lo pasado
entre mis sangres
está latente
en cuatro espacios
fusionado
me sumerjo en los recuerdos
como en mis vidas
pasadas
miles de ojos observan
millones de piernas
caminan
y bellezas veo
como en un recuerdo
presente y destellante
recorriendo sobre el polvo
todo el Perú
entre vulgares cuerpos
andantes
dentro de hermosas almas
ocultas van
en el Jirón de la Unión
donde parapetado me encuentro
conmigo
en los rostros ajenos
a lo negado bajo la piel
penetrado en los ojos
al recuerdo mío siempre ajenos
en un país que invoca
la eternidad
la perennidad
del recuerdo
en la belleza
inefable
para el que no sabe
y no conoce la existencia
del ecléctico país
donde abunda el maíz y los colibríes
donde el averno
quisiera ser sempiterno
en nuestro país
y de todos aquellos presentes o ausentes
que llevan en su vientre o en el pecho
la palabra
Perú
Perú o Virú como sea
ante los oídos sordos
siempre sordos
ante el recuerdo vivido
de un atisbo o matriz
del vernáculo pecho
o del sincrético lecho
desde inmemoriales e imperecederos
tiempos
ante el olvido y el pecho
jamás habido
como advenedizos
pisan nuestro piso
siempre fino
siempre escarpado
y como en un ecléctico Universo
siempre
siempre adverso
rebasando el tiempo y el espacio
más de diez mil años han pasado
y el hombre
y el pecho y el lecho
y unas manos cruzadas
siempre
siempre religioso
y ante el pecho advenedizo
jamás
jamás irrelevante
en un tiempo no comprendido
pero infundido
el Inti llora
y se oculta
ante los Andes rebeldes
y renuente se oculta
ante los hombres proscritos
en su lecho proscritos
para un Universo mítico
para el universo de los Wiracochas
en el tiempo no acabado
en el durmiente tiempo
del pecho que duerme y espera
la comprensión
aguarda
dejarlos vivir
y dejarlos llorar y sentir
lo del Universo adverso
de la magia y la leyenda
por siempre y para siempre de la realidad
desde lo profundo de un pecho
que yace dormido
pero no muerto
jamás muerto
ante lo que significa y no dignifica
una muerte extranjera
y desde eternos conocimientos
él espera
su despertar eterno
y etéreo espera
desde Chavín hasta los Incas
siempre sempiternos
empezando por la mítica leyenda
hasta la arquitectura más concreta
de nuestros tiempos
escondida o no entendida
matando en el olvido un hecho vivido
de inmensidad eterna
es así que hoy entre sacros quipus y surcos
dejo la senda pequeña
del que entienda la seña
como peruano hablo
con mi razón y con el corazón
hablo
porque éste es mi lecho
y ningún cuerpo no habido podrá
hacerme olvidar este hecho
por que peruano es mi pecho
y desde mi sangre y mi raza y mis ideas
les digo que el Perú
es como una ingente Huaca
que en la Lima de hoy se pierde y se abandona
en un Mundo extraño
en un Universo nuevo
al que ningún peruano o tal vez uno
dirige con conspicua mirada
hacia un recuerdo no olvidado
en un olvido no aceptado
de un pecho enamorado de un pecho reencarnado
de lo nuestro de lo suyo de lo de dentro
de lo inefable
que posee en el recuerdo
mágico recuerdo de un Universo escondido
de un Universo incomprendido
esperando el reencuentro
esperando el sueño antiguo
de la vida que no acaba
de la muerte que no es el fin
sino que llama
desde los Apus nos llama
a un Universo mágico a un Universo mítico
donde el tiempo no es olvido
donde el tiempo no mata
es el mundo eterno y etéreo
del conocimiento
del conocimiento escondido
que aguarda
el conocimiento aguarda
en los rostros
en la tierra
en las rocas
entre las aguas
veo anonadado carteras y alforjas
que secretos guardan
y aguardan
en la timidez como vida
en sus almas escondidas
y con las manos en el pecho alejadas del lecho
me llaman
y te llaman
despertar
a sus prisioneras almas del cuerpo
del cuerpo que olvida
de cuerpos perdidos
en el olvidado Mundo
entre universos no habidos
universos no conocidos
en el pecho no encontrados
latiendo con fuerza los silencios
en materias no descubiertas
no entendidas
los gemelos perdidos
se buscan
se buscan y se pierden
por no conocerse en la inmensidad
se pierden
tras la propia historia se pierden
en la inmensidad de lo conocido
de lo no comprendido
no se encuentran
en la oscuridad perdidos
navegan
en la figura inerte
en la figura desamparado
siempre mirando
y mirando
hacia abajo
y ven el cuerpo
y ven el cuerpo
pero jamás el alma pero jamás el alma
lo que Es Fue y Será nativo.

* * *


© 2006, Salomón Valderrama
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Para citar este documento:
Valderrama, Salomón: «Poempro: A mis ojos. Poema», en Ciberayllu [en línea]

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