[Ciberayllu]

Axenos

Madeline Millán

 
 

El inhospitable

Nada se mueve bajo el sol
si el mar es la inmovilidad del movimiento

José Emilio Pacheco

 

He presentado esta propuesta en una universidad de California,
lugar de cuyo nombre no quiero acordarme. 
Éste es el punto de partida:

«Among a dredge debris was a piece of wood dated 3,500 years ago,
Could that be right? It was a shallow water, clear of the anoxis abyss,
What was it doing there, and how could it have endured so long?»

Debo demostrar lo indemostrable, el principio de la investigación
se origina así: Pusimos a prueba la teoría de Ryan y Pitman
con sus caracoles de lago y agua salada:
(los Turricaspia caspia lincta y los Dreissena rostiformis var distincta
y con los Bittium reticulatum y Abra alba)
Un encuentro confirmado por abismos de ultramar
¿cómo llegaron?

Yo habré de descubrir de qué están hechos todos los mares
y si en verdad la muerte en el mar Muerto preserva la materia
Agua bajando que lo formó 600 metros debajo del nivel del mar
de hielos derretido con la fuerza de 200 cataratas de Niágara
atravesando por la edad neolítica, hace 7,500 años
Pienso
Así fueron las cóleras que te anegaron de negro

Te fuiste del mar Mediterráneo
y a través del valle del Bósforo
como agua más densa te hundiste en su hueco invisible
capa más liviana (ésta ha de ser la lectura por donde salimos a flote)
Ya veré si lo delineó un lago en su fondo
sepultado y revuelto en sedimento negro

Hasta la corrupción de la materia huye de ti
a pesar de parecerte a la muerte no corrompes
ni con ser como las tormentas de Saturno a los turistas alejas
y al anciano que se sumerge con descaro en la noche —hedionda e inerte—
das antídoto y vida, diciendo «entra en mí»
El sulfuro de hidrógeno de olor a huevo podrido
se confunde entre las brisas del inhospitable
espanta a los peces   —eso si antes no los mata—

Vienes de donde yo he venido, y te conozco
te exploro con el ojo y con el tacto
y máquinas que se sumergen y regresan oxidadas
con más preguntas que respuestas

No hay diferencias de temperaturas como en los demás océanos
anoxia total porque el oxígeno no llega a tu sedimento

Eso eres tú un mar equivalente a mi infierno
cuando escribo de lo que los demás no pueden
invento con retazos aquello que mis predecesores han dejado ya vencidos
entonces, el disparate y el método de la hipótesis resulta mayor
que el resultado

Resumo en calidad de colector:
un ánfora de Sinop, maestros navegantes de Scripps Institution of Oceanography
un robot de Woods Hole Oceanographic Institute
que ordena los datos, que interpretan sabiondos de MIT y de Columbia

Ahora bien, los peces y los pescadores saben más, y yo los oigo
y cito aunque los doctos cuestionen la validez de observación:

«cuando las redes se sumergen y regresan negras y corroídas,
es porque el mar Muerto terminará estando realmente muerto en los próximos años
El abandono sigue siendo signo
de la naturaleza de sus aguas. No hay más que decir.»

Excepto indagar en los basureros de la muerte
Anoxia dentro del corazón mío
oxímoron sobre el que doy vueltas por el cerebelo

Yo salí anulado en la travesía, tanto nadar para morirme en la orilla
páginas y páginas que ni yo mismo comprendía
a la hora del juicio académico esto fue lo que produje
y me marché por donde vine, con las manos vacías
revelaciones, ciertamente
un nuevo lenguaje, quizá
reflejos de un atardecer en la costa de Turquía
un incendio voraz con papeles
el barro del ánfora y la forma avanza
(no el sentido) donde retrocedo
O bien el sentido de otra cosa para otros que no conozco
donde empieza la biografía no se piense en el sujeto
y donde termina el objeto de estudio con copia en Náutica y Arqueología de Texas
archivado en un anaquel con firmas

Manera de nombrar el suicidio
y dictar la imbecilidad del intento

 

Comentario privado a la autora: © Madeline Millán, 2001, [email protected]
Comente en la plaza de Ciberayllu
Ciberayllu

Más literatura en Ciberayllu

294/011115